Después de visitar la Cité de Carcasonne...
En pleno corazón de la Provenza, entre la ciudades de Nimes y Avignon, y más concretamente a 24 y 26 kilómetros de cada una de ellas respectivamente, nos encontramos con el Pont du Gard, un imponente y bien conservado acueducto romano construido en el siglo I, hace aproximadamente 2000 años.
Con sus 3 filas o niveles de arcos superpuestos, sus 49 metros de altura y sus 275 metros de longitud en su nivel más largo, el Pont du Gard es el puente antiguo más alto del mundo, además del único con dichas características que aún sigue en pie.
Por si fuera poco el mero hecho de contemplar de cerca y disfrutar de semejante MONUMENTO (así, en mayúsculas), llegando incluso a caminar por encima en su nivel más alto y recorrerlo completamente, el Pont du Gard se encuentra en un entorno natural de gran belleza. Y así, entre las múltilples actividades que podemos realizar por sus alrededores, recomendamos encarecidamente nuestro ya clásico y refrescante chapuzón en el río Gardon, que lo atraviesa, una tranquila travesía en kayak o un relajante paseo a pie o, por qué no, en bicicleta de montaña.
Además, en la orilla izquierda y muy cerca del Pont du Gard, tenemos a nuestra disposición un centro de exposiciones en donde podemos conocer algunos detalles de la historia de su contrucción, así como comprar algún souvenir o producto típico del lugar y comer o beber algo para reponer fuerzas. Como anécdota, comentarles también que en una pequeña plaza que hay junto a dicho centro de exposiciones, hay tres olivos espectaculares, uno de ellos traído desde España con más de mil años sobre sus raíces.
Antes de terminar, y para que puedan contrastar y ampliar la información que aquí les presentamos, les recomendamos visitar la web oficial del Pont du Gard (en español).
Por último y una vez más, te animamos a comentar la entrada compartiendo tus opiniones, correcciones y/o sugerencias. Y si no quieres perderte realmente nada, puedes seguirnos en la página de Facebook de Viajes, senderismo y aventura o suscribirte por correo electrónico.
En pleno corazón de la Provenza, entre la ciudades de Nimes y Avignon, y más concretamente a 24 y 26 kilómetros de cada una de ellas respectivamente, nos encontramos con el Pont du Gard, un imponente y bien conservado acueducto romano construido en el siglo I, hace aproximadamente 2000 años.
Con sus 3 filas o niveles de arcos superpuestos, sus 49 metros de altura y sus 275 metros de longitud en su nivel más largo, el Pont du Gard es el puente antiguo más alto del mundo, además del único con dichas características que aún sigue en pie.
Por si fuera poco el mero hecho de contemplar de cerca y disfrutar de semejante MONUMENTO (así, en mayúsculas), llegando incluso a caminar por encima en su nivel más alto y recorrerlo completamente, el Pont du Gard se encuentra en un entorno natural de gran belleza. Y así, entre las múltilples actividades que podemos realizar por sus alrededores, recomendamos encarecidamente nuestro ya clásico y refrescante chapuzón en el río Gardon, que lo atraviesa, una tranquila travesía en kayak o un relajante paseo a pie o, por qué no, en bicicleta de montaña.
Además, en la orilla izquierda y muy cerca del Pont du Gard, tenemos a nuestra disposición un centro de exposiciones en donde podemos conocer algunos detalles de la historia de su contrucción, así como comprar algún souvenir o producto típico del lugar y comer o beber algo para reponer fuerzas. Como anécdota, comentarles también que en una pequeña plaza que hay junto a dicho centro de exposiciones, hay tres olivos espectaculares, uno de ellos traído desde España con más de mil años sobre sus raíces.
Antes de terminar, y para que puedan contrastar y ampliar la información que aquí les presentamos, les recomendamos visitar la web oficial del Pont du Gard (en español).
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Hay algo fascinante de la cultura Romana. Sus grandes avances en muchas materias y como llevaban el agua siempre adelante, hubiera montañas o barrancos buscaban la forma de llevarla hasta su objetivo final.
ResponderEliminarUn gran descubrimiento este lugar del que no tenía ni idea.
Gran trabajo y preciosas fotos.
Un abrazo ;)
Es impresionante lo mucho y muy bien conservado que hay repartido por casi toda Europa y el norte de África. A ver si inventan ya de una vez los viajes en el tiempo... ;o) Un abrazo!
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